Dos amantes.
Deseo y pasión.
Sexo y amor.
¿Y la amistad,
la complicidad,
el cariño?
Una madre y unos hijos.
Amor, a veces con mayúsculas,
a veces en minúscula.
A veces egoísmo,
tal vez zancadillas...
Una madre y sus hijos.
Una mujer y su contraste en el espejo.
Asco, frustración.
Crítica despiadada, mordaz y feroz.
Pero, a veces, amor puro por
un cuerpo imperfecto,
en su descuido y abandono,
que puede llegar a provocar
¡tal ternura!
Como ternura provoca una criatura.
No importa su color,su forma de sonreir,
su manera de hablar,
su vitalidad agotadora...
La ternura que emana te espina el alma.
Te la deja dolorida.
Dolorida en la entrega.