Madre:
¡A la joven que un día fue, cual mañana esplendida;
A la señora, la amiga, la autora de mis días, mi madre!
Si acaso alguna queja, o algún reclamo contra ti yo he tenido…
¡Líbreme Dios de levantar mi voz para declarártelo, líbreme Dios de…
.. De alzar mi mano para inculpar a mi madre y de ella hablar mal!
Empezaré diciendo que el mensaje que mi madre me ha transmitido
ha sido un mensaje de amor, un amor paciente, un amor diferente...
Ella fue la mujer, que Dios eligió para que naciese yo. Su vientre,
Fue mi cuna, cálida, cómoda, confortable, y sobretodo segura:
¡Bendita sea mi madre, bendita entre todas las mujeres!
Ella me ha enseñado con sus acciones y decisiones que;
Sentir amor es cosa diferente a lo que piensa mucha gente;
“madre junto a ti yo he aprendido que el amor jamas muere,
Si, el amor es inmortal mamá, yo no creeré en lo que se repite,
No creeré eso de que el amor muere, que el amor pasa, o cambia,
Yo he visto en ti, que el amor es intenso, fuerte, es infinito…
Y sé que es inmortal porque he visto cuando te ha fallado…
Que no me has dejado, no te has alejado, has llorado si,
Madre pero tu amor, tu amor jamás desaparece, no fallece,
aunque el ser amado te ha decepcionado, te ha pagado mal.
Por eso madre las mentiras sobre el amor no me han afectado,
Más bien he comprobado lo aprendido junto a ti… del amor,
Puesto que junto al amor yo he crecido, lo he conocido un poco.
Yo crecí junto al amor, el de mi madre, su amor interpreta
Mi llanto como una necesidad, como un suplicio desesperado
Aun cuando ella dormía serena, su alma y corazón me oían.
Por eso gritaré a voz en cuello, que; aunque no he nacido adinerado…
(No tengo más que unos centavos en mi bolsa, pero)……….
He tenido infancia, he tenido el tesoro más grande el amor de mi madre”
……
En la madre, la mujer que se entrega, que da su vida entera
.. que se levanta primero. Pero…es la última en acostarse….
yo…Reflexiono en esto muchas veces….
Madre eres tú el más grande tesoro, eres don divino….
Pero, me da tristeza escribir esta parte…..
Escribir de nosotros… los hijos… no todos…
Pero somos mayoría lamentablemente: …..
Es que nosotros, muchas veces no sabemos valorarte…
No te cuidamos, no te escuchamos, no te veneramos,
Así somos muchos, no lo hacemos, no te honramos.
Madre: muchos hoy te han perdido y recién han visto,
Se han dado cuenta madre, que tú, eras un ángel de luz,
Que les cuidaba, que los protegía, y los defendía…
Un ángel con quien se podía hablar, un ángel para abrazar.
Madre: quienes te tenemos, a veces, te ignoramos…
Te reñimos, te juzgamos, y a veces te condenamos..
Pronto nos olvidamos de tus desvelos de tus cuidados,
Que desde pequeños nos has dado….Madre…
(Me veo obligado a hacer una pausa, a causa de unas
lagrimas... que este sentimiento impotente nacen…)
Que ironía, que contradicción la de tu vida… madre;
Y es que cuidando con amor, dedicación, ternura y cariño,
Sufres el rechazo, el menosprecio, y hasta el odio,
A veces desde muy joven, pero más en la vejez….
Nos avergonzamos de tu humildad, de tu sencillez,
De tu cabellera blanca como la nieve …
De tus ojos cristalinos, esos ojos, ¡ay madre!..
Esos ojos ojitos tuyos, los mismos que se quedaron,
Perdidos mirando al infinito, al ver partir al hombre,
Al ver irse a la mujer. ….Esos que antes, de niños…..
Entre tus brazos arrullaste, y alegremente les cantaste,
Una melodía, ¡Oh madre tu canto un canto angelical!...
Lograba dejarnos dormidos, quietos por un momento…
Madre: yo quisiera escribir cosas buenas, positivas, pero,
Mas son las penas y tristezas que te damos, son muchas..
Comparadas con las escasas sonrisas que provocamos...
Concluiré con lo siguiente…….
“madre hay solo una y como ella ninguna”….
Si la amamos, y no la ignoramos…si le escuchamos...
Si dejamos de juzgarla, si solamente nos preocupamos...
Nos preocupamos de amarle, y, procuramos no olvidarla,
Si le honramos y la veneramos, viviremos sanos…
Sí, sanos del alma, y del cuerpo; seremos bendecidos…
A la joven que un día fue, y pasó de ser mujer a ser: la madre de este ser;
A la medre a la mujer que da su vida sin importar más nada que su familia;
Al más grande regalo de Dios recibido…
“madre hay solo una y como ella ninguna”….…a ti… madre.
P.S:
Perdón por escribir así……solo quise mi parecer compartir.