Linda noche
para salir
de garufa,
pero Elfo
estaba cansado
de tanto
deambular,
de tanto
lugar de la
noche ...
Y al borde del río
se echó
a la luz de las
estrellas
se durmió...
En esa
vigilia
un sueño
soñó...
que su amada
de los quince años
se le aparecía
entre sueños
lo llamaba...
Un peligro
la acechaba.
Elfo que en
nada de eso
creía, agarró
la rienda bien
fuerte de su
caballo y
se largó
pradera abajo.
Ahí estaba
la Juana
a punto de
ser violada,
se hizo de
su cuchillo,
y espantó
como mosquitos
a los tres hombres
ebrios,
que intentaban con
su fuerza brutal
conseguir algo
que no era
de caballeros...
Ahí se cruzaron
nuevamente
las miradas,
la Juana le
quedó eternamente
agradecida...