Las cartas que nunca te he escrito
Hoy son las poesías que te llaman
Las voces que no puse en esos cuencos
Naufragaron en tus manos
Las canciones son solo eso
Muchas soledades provocadas
Con la creación agazapada en vos
Cuando no estabas, lúcido pecado
Confluencia de deseos y locura
Cuando te fuiste apareció tu halo sin quererlo
Se metió en mis sabanas con tu perfume
Cambie la ropa y volviste cada noche
Qué significa esta creación tan impensada
Si ambos sabíamos que no cabían
A priori otras esperanzas,
No de vos
No de mi, de nosotros uno a uno
Esa soledad que vos de a ratos
Rajas en la pared de la esquina aquella
Esa que escribiste en tu niñez
Parecida al umbral de mi casa vieja
Será tal vez, esa la unión que nos fijamos
Sin saber, sin propuesta,
Ese intermitente desamparo
Fue el motivo y también fue el fracaso
Hoy sos en mi, en cada bolsillo de mi alma
Un montón de dolores recortados
Para vos seré un cargo de otras dimensiones
Y ambos confluimos en la mesa
Cuanta alegría de volcán
Cuanto sexo, dulce caricia inesperada
Sin embargo
Transformamos nuestro dialogo en un dilema
Por tener miedo, por vergüenzas alquiladas
Por prejuicios de otras calles anunciadas
No se si fue todo eso, o simplemente
No supimos compartir nuestro camino
Una vereda angosta y muy sinuosa
Pero era la única de nuestro inventario
Que pena, decir lo que no supimos ambos
Justo a tiempo de creer y no lo hallamos
Diría algún viejo sabiondo de mi barrio
Es la vida, muchachos, solo ella
No reprochen nada, no hay espacio