En tus ojos hay centellas fulgurantes
Más intensas que la luz de las estrellas,
Rielan rayos que en el alma dejan huellas
Cual candor de manantiales incesantes
Tus pupilas son dos joyas de diamantes
Refulgiendo en el cristal de sus catleyas,
Resplandecen con pasión en noches bellas
Como auroras de universos fascinantes
Los colores del espacio, transformaste
Con miradas que brillaron Sol de fuego,
Mixturándose galaxias que creaste
Y en instante, con visiones me cegaste,
Mas no dejes de mirarme, te lo ruego,
Ya que amor de enamorado, despertaste…