nelida anderson parini

AMOR, DIAFRAGMA HACIA EL ALMA.

Qué hermoso es vivir la vida

queriendo como te quiero

el sentimiento certero

común unión consolida,

la existencia compartida

hace al corazón dichoso

cual milagro prodigioso

torna dos seres en uno,

sin ser omiso en ninguno

su efecto es maravilloso.

 

Cuando el amor es sincero

vivir es don generoso

el día es más luminoso

y el descanso es placentero,

todo sueño es valedero

el trabajo es redención

amar es revelación

de entregar sin egoísmo,

libre de duda o dualismo

sentimiento en convicción.

 

Por vida de amor infecta

danza el alma en bendición

esmerada vocación

generoso amor proyecta,

bondades con las que humecta

trago amargo o desazón

desbordado el corazón

en frenética alegría,

palpita con valentía

de sí su mejor razón.

 

Da el amar sabiduría

develando su secreto

llamando  amor a respeto

desconoce altanería,

desoye palabrería

que endurece la mirada

no tiende mano empuñada

ni es desconfianza o recelo

es omiso en causar duelo

e incapaz de alzar espada.

 

Sabe abrirse en el consuelo

con genuina honestidad

guardando serenidad

aploma sus pies al suelo,

su bondad te eleva al cielo

con alas blancas y puras

liberador de ataduras

en dolor es solidario,

lleva su alivio en breviario

copado de mil ternuras.

 

Elixir pleno en dulzura

néctar libre de aflicción

en copa de perfección

total binomio conjura,

creando ideal mixtura

 fragilidad y belleza

gestan su mayor proeza

al ser incondicional,

no amarga sabor banal

cuerpo ni delicadeza.

 

Amar es naturaleza

de esencia pura y divina

razón donde se aglutina

en el alma gentileza,

motivo de fortaleza

y alegría desbordada

en acciones refrendada

es amar acto gozoso,

emprendido jubiloso

por un alma enamorada.

 

Cómo refulge mirada

cuando se está enamorado

reluce el ojo esmerado

esperanza iluminada,

entusiasta coronada

su dicha se orna en colores

ungido el iris de amores

proyecta vivacidad,

radiante en felicidad

brilla libre de fragores.

 

Qué bella luce la vida

qué sutiles sus olores

cuando vestida de amores

de su dicha nos convida,

con dulce ahínco nos cuida

derramando bendiciones

tul de cálidas visiones

en suavidades abriga,

desprendida se prodiga

para inflamar corazones.