Puede ahorrarse señor
todas sus dulces palabras,
no tengo tiempo ni ganas,
a usted no le sobra el dinero.
Un rato me ha tenido
no se complique la vida.
Señor,
escucharle no me pida.
Lo que busca
no hallar en mi alcoba
entristecer no debiera
si la cabeza no le estorba.
Un rato me ha tenido,
aquí no para Cupido.
Ya ve lo que somos.
No cambia su labia nada,
y en cueros no hay
donde esconderlo.
Usted un hombre apenado
yo una puta cansada.
Si consigue más plata
seguiremos esta charla.
Agrada señor
el cariño demostrado,
por mi nombre ser llamada,
cuidarse de mi estado.
Más sépalo,
lo recibe una veleta.
Unas veces a su cara reirá
otras le dirá gracias.
Sigue empeñado todavía.
Despierte de su engaño.
No soy su vida
ni cautivo tengo
su triste corazón.
A quien me paga
feliz hago
de cintura para abajo.
Se llena la sala,
váyase por favor.