rinconpoetico

Nuestra Corta RelaciĆ³n

No, no culminamos el manuscrito.

 

Si quiera nuestra historia fue un cándido prologo

mucho menos que una refinada introducción,

pues cuando quise ser de ti un volumen entero

pusiste el punto a mi parcial oración.

 

Sentirse prohibido antes del prefacio del amor,

es como escribir sobre páginas ya escritas.

¿Porque añadir mi pensar a lo que ya has negado,

si es martirio a un dolor cual nadie alivia?

 

No, no finalizamos el acta o pergamino.

 

Ni los ciegos leerán  lo que pudo haber sido leyenda

de un capítulo dulce y tierno, emotivo.

Solo el ligero viento apremiará el egoísmo

de este intrépido autor sufrido.  

 

Ahora todo es vacio, silencio y  vigilia

sobre líneas incompletas y pensamientos inmaduros;

sobre disertaciones ilusorias que exigen tú figura

para darle sentido a estas blancas hojas.

 

No, no concluímos la letra, el acta u archivo.

 

¿Quién publicará lo que nunca fue indiscutible,

lo que nunca tuvo derecho a ser?

Nadie leerá sobre un amor desinteresado

que jamás respiró después de nacer.

 

Capítulos y dolorosos párrafos narran un medio cuento

que comenzó esperanzado y terminó huérfano.

Cual dio vuelo a los montes y culminó entre las colinas

sin alas en su cuerpo, sin potencia en sus manos.

 

No, no hubo expediente, minuta o catálogo.

 

Tal vez en la primavera me mirarás con ojos humanos

y notarás que milita en mi pasión para escribirte dóciles cuentos,

con ilimitados títulos y párrafos sin desenlace,

llenos de escenas teatrales y finales eufóricos.

 

Daniel Badillo.