Se escapa como un soplo
abrumado en la endeble sombra.
Confusa, en un momento,
tras el sentimiento de la ausencia.
Como un lamento desvanecido,
al borde de un abismo de suspiros
saciados de murmullos vulnerados.
Como tantos frágiles amores
de furtiva querencia desvanecida,
entre las olas del recuerdo callado.
Como el aire que se consume,
cuando encuentra el llanto errante
perdido en el cadencia del sollozo.
Como esa sincera sonrisa
encontrada en el camino,
que se adormece en el atardecer
de la esencia cubierta de desnudez.
© Víctor Manuel Gutiérrez Caballero