En un tiempo lejano
mi cuerpo no amaba
mi cuerpo detestaba
de mi ser se burlaban
Me encerraba con mi soledad
no podía soportar más frialdad
nadie tenía solidaridad
todos me gritaban vulgaridades...
Mis lágrimas no cesaban
mis padres se preocupaban
Mi dolor iba aumentando
y mi vida se iba desgastando...
No quería de mi mundo salir
solo quería partir
Mis padres no querían verme sufrir
solo querían que sea feliz...
Un día ellos mi dolor querían quitar
decidieron que era tiempo de operar
ese defecto tenían que modificar
asi me podría yo amar...
Los médicos dijieron que no podían operar
que un tiempo debía esperar
porque mi corazón no iba soportar...
Un año así de repente un dolor
de mi pecho y de mi brazo se apodero
al doctor tuve que socorrer
y de sus labios la palabra derivar tuve que escuchar...
A los pocos días tuvimos que viajar
para mi corazón poder operar
y mi defecto tendría que ignorar...
El médico me hizo comprender
a Dios y a mis padres agradecer
el gran regalo que me estaban por hacer
de volver a renacer...
Despues de la gran intervención
mi corazón sano ya estaba
y a mi cuerpo yo respetaba...
Y aquel defecto que yo odiaba
aprendí a amarlo...
Gracias a esa cualidad de mi cuerpo
que me hacía diferente
pude ver la vida de una manera distinta...
Aprendí que nadie es perfecto
que todos tenemos defectos
que guardan sus secretos...