Sin voz….
Son vagabundas
las palabras de mi boca
vociferando sus miedos
con gritos en mudecidos
ocasos inertes estrellados al piso
Los pies pegados al cemento
echando raíces
entre escombros del pasado
enraizadas vibraciones
adentrándose en el suelo
hierve al calor de los días venideros…
No hay oasis, no lo hay…
en el desierto de mis lamentos
los peces fuera del agua
ya no respiran y agonizan
entre el calor inerte
sin brisa que apacigüe
la encorvadura de lo muerto..
En la orilla de la cordillera
mudos los ecos y descalzos
pies llagados de celibato.