Ya no puedo seguir escondiendo mi dolor
Cada día de mi vida me levanto y esa pena sigue en pie
Desesperadamente busco calor y alivio
Con una mirada alegre y una sonrisa en el rostro sufro por dentro
Mi tenue corazón se marchita y se muere sin amor
El paso del tiempo sólo hace más grande mi tormento
Mil veces maldije y a mil paredes golpeé
Mil mundos recorrí y varios kilómetros caminé
No hay salida, no hay escape ni alivio
Con la piel desgarrada, por mis propias uñas, me miro al espejo
Contemplo mi propia melancolía y con lágrimas en el rostro
Suplico por un poco de cariño a miles de sombras de mi deseo