Quisiera poder tenerte cerca y decirte muy despacito, que eres la luz de mis ojos, que no te quiero perder ni un poquito.
Aun así se que te vas y quizás no volverás, cuanto diera yo, que eso no fuese verdad.
No te vayas vida mía. Te dice mi corazón, pero tú estás sordo y no oyes de mi amor.
Solo queda decirte adiós y con mucho dolor, porque sé que a dónde vas te espera tu gran amor.
Yo sería tan feliz de que voltearas un día a mirarme
pero esperanzas ya no tengo. he llegado a tu vida muy tarde.