Donde quedo el amor que me juraste
Aquella noche, bajo las estrellas
Junto al árbol más frondoso,
Ese mismo que nos vistió de amor.
Cuando besaba tus labios, viendo la
Inmensidad de tus ojos quise descubrir
El fuego, la pasión que esconden
Y nos desnudamos el alma ante el viento.
Y bajo la luna llena con la luz de su amor
Bendiciéndonos hasta quedar preso en el
Adiós dejando de testigo este árbol que
Escucho todas mis promesas de amor.
En volver aquí a encontrarte a besarte
Y nuevamente ser feliz a tu lado, solo que
Me quede en silencio viendo la luna y sus encantos
Escuchando al viento tu susurro pero no estabas.
Se te olvido la promesa de amor
Que me hiciste y de tristeza ese árbol frondoso
Por nuestro amor se comenzó a secar
Dejándome a merced del viento.
Diciéndome que tú jamás me volverías a ver
Me corrió de su lado, dejándome que la lluvia
Me mojara y el sol me quemara pero hoy comprendí
Que no quería que sufriera por tu amor.
Las penas del corazón se disipan como el alcohol
Sin tapa, las sonrisas en el rostro las pinta la vida
Con cosas sencillas los versos de amo o de rencor
El tiempo los afilas pero un amor no se olvida.
He aprendido a vivir con tus recuerdos
Ya no me duele mucho saber que no volverás
Pero me da tristeza saber que este árbol
Jamás sus raíces renacerán.
Y ahí quedo con tus promesas de amor
Con tu nombre y el mío tallado en su piel
Recordando el día aquel en donde se condeno
Apostando por tu amor sin saber.
Que nunca le importo el sentir aquel
Cuando la luna nos miraba disfrutar del amor
Momentáneo que solo tú puedes hacer,
Por tu fidelidad cien arboles a tu honor
Y por su infidelidad cien años con otro amor.
Escrito: Francisco Gaitán Downs.