ELEGÍA A MI PADRE
“Silencio, las manos que nos bendijeron ...” (Ricardo Nieto)
Esas manos fuertes, esas manos buenas
que nos corrigieron y que al igual llenaron
de alegrías y de gozo nuestras vidas,
esas manos sabias, esas manos buenas
hoy se encuentran frías.
Esas manos que arrancar pudieron
los acordes a la bandola y la guitarra
que cantar hicieron nuestros corazones
en unísono son y melodía alegre
hoy se encuentran mudas.
Esas manos que construir supieron
de palacios y templos y colegios
dejando a la posteridad proscenios
de arte, remansos de cultura, calor de nidos,
hoy se encuentran quietas.
Esas manos que indicar pudieron
el camino por donde guiar la prole
y que llevaron el sustento diario,
el pan, la rienda del carruaje
hoy se encuentran yertas.
Esas manos que se alzaron implorantes
ante el trono del Señor de las bondades,
ante la Augusta Majestad del infinito,
pidiendo amor, bendición, perdones,
hoy se encuentran recogidas.
Esas manos que supieron irrigar el surco
con las semillas de vida y mieses,
cosechando ora frutos, ora penas,
ora dichas, ora ilusiones y quimeras,
hoy se encuentran presas.
Manos santas, manos creadoras,
manos llenas de amor, de dulcedumbre,
manos hechas para la bendición, el arte,
manos llenas de bondad, de reciedumbre,
vivas seguid, seguid sembrando.
Manos bienhechoras, manos de amigo,
manos prestas a socorrer, a dirigirnos,
manos listas para bendecir salvando,
manos protectoras, manos buenas,
vivas seguid, seguid luchando.
Manos de trabajador, manos callosas,
manos expertas, ágiles y fuertes,
manos llenas de empuje, manos sabias,
manos llenas de fe, manos incansables,
vivas seguid, seguid obrando.
Manos de artista, manos de mago,
manos para la música y el arte,
manos para crear acariciando,
manos de ángel, manos inspiradas
vivas seguid, seguid creando.
Manos de hombre, manos de padre,
manos para el perdón, para el olvido,
manos para educar alimentando,
manos para corregir, manos hermosas
vivas seguid, seguid amando.
Con amor filial: José Jacinto