Deseo.
Deseo con tal fuerza poseerte
que mi amor es desesperación,
en suicida… se convierte mi pasión
al sólo pensamiento de tenerte.
Deseo tu boca y me atormenta
pensar que de otra boca puede ser,
siento dolor… espanto al suponer
que el calor de tu cuerpo alguien sienta.
Deseo la luz de tus pupilas
como si luz mis ojos no tuvieran,
pues sé…que si tus ojos míos fueran
mi mundo sería un rosal en filas.
Deseo de tus manos la tibieza
en suave terciopelo de caricias,
deseo… de tus brazos las delicias
que arranquen de mi vida la tristeza.
RESERVADOS LOS DERECHOS DE AUTOR:
MIRIAM ELENA RINCÓN URDANETA.