Cuando tus pasos se nieguen a proseguir el camino
por ser trayecto quebrado, sembrado de agudo espino.
Cuando tus ojos no basten para ver la luz del día
porque tras turbia mirada, toda visión es sombría.
Cuando la ilusión se ha ido a algún planeta lejano
y tratar de rescatarla piensas es esfuerzo en vano.
Cuando los sueños se duermen y mutan a pesadilla
y andando en eterna noche, tu propia estrella no brilla.
Cuando el sol ya no calienta y en tu espíritu hace frío
y todo aquello que piensas y sientes te causa hastío.
Cuando no existe en tu día ni un segundo de alegría
y todo espacio en tu cuerpo, se etiola en melancolía.
Cuando el tiempo te aprisiona como agónica condena
y abarrota el sentimiento, la más cruel y horrible pena.
Cuando no encuentras la razón o el sentido de la vida
y por más que tú te esfuerces, no logras hallar salida.
Cuando en un día cualquiera quieras darte por vencido
tómate un tiempo primero, que no todo se ha perdido.
Que no has venido a este mundo a sufrir sin más sentido,
si todo aquel que ha luchado, en la batalla se ha herido.
por qué tú has de rendirte antes, sin haberlo conseguido.
Deja que fluya con fuerza la esperanza por tus venas,
decreta en tu pensamiento la ruptura de cadenas,
agasaja tu corazón con pálpitos de armonía,
que pulsando está el amor su rítmica sabiduría.
No te empeñes en regar pensamiento de aprehensiones,
apacienta turbulencias sin tratar de hallar razones,
que al final las soluciones de algún modo encontrarás,
todo tiene un tiempo justo y a su tiempo entenderás.
Si la vida te fue dada sin haberla tu pedido
y esperando tu llegada fue hecho mundo colorido,
donde cada día amanece en bondades coronado
un planeta generoso para ti, fue diseñado.
Es ahora tu momento para entrar en señorío,
líbrate de esa impotencia, que te sume en el hastío,
es tu esencia poderío, la expresión de tu grandeza
eres ser de gran valía, tu existencia es tu riqueza.