MODESTOELPOETA1953

EL SONÁMBULO QUE VIVE, DENTRO DE MI

Anoche mi cuerpo salió a la calle,                                                                                                                               Me fui, a mi antiguo puesto de trabajo
Hice sacos y malla y trabaje
AL despertar todo fue un sueño amargado...
Vi a mis compañeros en sus puestos de trabajo
Y Subí a la Extrusora, a descargar el fil.
Divina noches, aunque se convirtió en un fracaso
Y Cuando  me di cuenta, empecé a sufrir...
 
Mi sicóloga dice que es normal, por la intensidad
Que hacía en 12 horas y está grabado en mi ser,
El cerebro es una máquina calculadora. De intensidad
nadie sabe lo que va a soñar, son misterios sin resolver...
Mis compañeros me decían que era un pelota
Y mis Jefes también, yo jamás fui esa cosa,
Sólo intentaba que todo saliera bien en mi esfera,
Un mundo que gracias ¡Dios! lo escribo en prosa...
 
Pero la verdad es que en el trabajo sufría mucho
Por mis compañeros, mis jefes y también por mí,
Era muy difícil torear en una plaza, de intruso
Quiero decir que es muy difícil ser parcial de por sí...
Yo lo era y mi manera de actuar, fue muy sutil
Aún me veo intentando, apaciguar a Solera,
Un compañero lleno de ira y locuras sin fin,
Pero yo lo convencía, para que tejiera en su parcela...
 
Todos tenemos lo nuestro pero este amigo y compañero,
Me amargura más días, que al contrario hizo sonreír,
Es tan inseguro que te contagiaba todo su empeño,
Hay, amigo Solera, aún sigues necesitando de mi...
Por eso me llamas a menudo y hago  de sicólogo,
En lo que te puedo servir y es llevarte la corriente
Y darte buenos consejos, para que seas  bueno,
Con tu mujer y tu entramado familiar inteligente...
 
 A todos mis compañeros detrajo los psicoanalice
Y todos en general  comprendieron que los servía,
Sin ningún rencor ni maldad, porque su debacle
Al principio, fue la tonta envidia que emergía...
Hasta qué el tiempo puso todo en su lugar,
Primero con mi encargado Juan, me apreciaba,
Después Pedro, también me busco en su hangar
Y después Roberto el vividor, me necesitaba....
 
Todo el ciclo se unió a mi favor y ahí comprendí,
Lo mismo que todos ellos que yo lo daba todo, por ellos
Sin pedir nada, aunque Santiago el bigotes sutil,
Tenía la maldad, y la envidia de los traicioneros...
Empecé con un sueño, Volando hacia el pasado
Y me he explayado en casi todo mi perfil,                                                                                                               Yo soy así, con la broma aunque me esté ahogando,
Pero os recuerdo compañeros que me comprometí...
Dejándome la vida como un Quijote en mi función,
Hacer mi trabajo y ayudar a todos. En la producción ,
Siempre con mi sicología y mi infinita dedicación,
Sufriendo entre máquinas viejas, con mi ilusión.
 
                        Modesto Ruiz Martínez / viernes, 01 de febrero de 2013        Enviado desde mi iPad