CORAZÓN DE MI ALIENTO…
…y aún existo, por la monja azarosa
cuando llegue el viento de la noche
yo te habré adorado en el silencio
y tendré de recompensa tu aliento
en la quimera perpetua de mi vida…
cuando llegue el viento de la noche
daré ecos a las vertientes de tus sueños
para hurtar los pinceles del cielo
y describirte en el firmamento un beso…
cuando llegue el viento de la noche
haré un poema en tus añojos
con una tersa hoja de nácar
pintada en un lamento…
cuando llegue el viento de la noche
haré un ciclón de pecados
para indultar los tuyos
debajo del atrio de tu manto…
cuando llegue el viento de la noche
cincelaré el himen de tus labios
sobre el limbo de la cúpula de San Pedro
y ante la vigilia de los apóstoles del Vaticano…
cuando llegue el viento de la noche
bajo la sombra de las estrellas
seremos lujuria a escondidas de las novicias
dejando huellas con ardor de las caricias
dejando rastro sobre la sombra del Ave María
dejando mi vida en las llagas de tus esquirlas…
cuando llegue el viento de la noche
estaré lerdo muriendo sobre el horizonte
porque tu recuerdo me matará constantemente
por la herida que dejé bajo tu vientre…
y en mi muerte escucharé gritar
a la soledad y al silencio de los fangos
que se enterarán de que tú me has amado
a escondidas de los hábitos cristianos…
cuando llegue el viento de la noche
rezaré al infierno por mis cenizas
y a la luz de tus pupilas
pintaré la historia de nuestra vida…
VÍCTOR ABEL NIQUINGA RUIZ
1996-II-6