Borrachos los oídos de sonidos,
imagino un bacanal de notas,
que aturden, que traspasan, que penetran,
en un acomodo desordenado.
Cuando comulgo en la inmensidad del mar,
nuestras controversias, se comunican,
mi enojo, mi rencor, mi nerviosismo,
los grito y los derramo en el viento.
Éste, los pasea y los domestica,
les toma de la mano como amante,
que lleva a su enamorada al lecho,
con amor, los deposita en el agua.
El embravecido mar, los zarandea,
como místico bautismo, lavados,
disueltos en las olas, te caminan,
en ese viaje, terminan por llegar.
Y lamer tus playas, y hacer el amor,
cada gotita con cada granito,
la ola regresa y continúa su viaje,
de purificadora de otras almas.
El viento vuela arena y forma otras playas,
aquí quedan grano y gota, y son uno,
dos corazones solitarios, juntos,
palpitan unidos, quien sabe cuanto.
EL POETA DEL AMOR. 12-11-12.
CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.