Entre mis sueños te veo desnuda,
Y me impresiona tu esbelta figura,
Me cautiva también tu ternura,
Tu belleza merece que la aplauda.
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Sin más me antoja probar tus encantos,
Aunque eso te parezca atrevido,
El placer siempre está en lo indebido,
Si es necesario les rezo a los santos.
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Aún te haces la difícil conmigo,
Soy insistente no te preocupes,
Aunque sea déjame ser tu amigo,
Esperaré hasta que te desocupes.
***
Ya no puedo contener mi llanto,
De mi ventana escucho tu canto,
Y a veces por las noches me espanto,
Me provoca descansar en tu manto.