(Tus ojos me vencieron)
La princesa culminó escribiendo…
“He aquí la espina de la rosa... Aquí está la hiel de la miel
Heme aquí con sentimiento fiel… Ahora alma mía ya sólo reposa”
Esa tarde sería la más recordada…para un corazón enamorado y para un corazón desilusionado.
La princesa de poco apetito estaba, casi no comía nada, pero, esa noche decidió darle un giro a su vida, meditaba y meditaba “mañana será un mejor día”…así de tanto meditar se quedó dormida:
Al siguiente día…
El joven que a dos horas del palacio vivía, cabalgo muy de prisa para ver a la princesa como solía,
Disfrutaba poder mirarle aunque sea a lo lejos, pero, ese día la encontraría diferente, se dispuso para avanzar de frente…
Ella caminaba a la orilla del río, miraban sus ojos fijos perdidos, meneaba su cabeza, ondeaban sus cabellos dorados, y, de pronto; se sentó, la flor se desmayaba, perdía color, en silencio hablaba mientras, sus ojos en el agua se reflejaban cual luceros tiritantes perdiendo su fulgor con el sol radiante…
De inmediato él se dispuso a escribirle, por un momento pensó en decirle que sus ojos le vencieron más, no era el momento, deseaba saber que era lo que le sucedía que parecía cual pajarillo mojado por el rocío, con frío, sin su canto arrullador, sin su trino, sin su voz….
Te he visto triste...
Qué ha cambiado en tu mirar
y forma de respirar?
Cual flor marchita, te miro,
y tu boca despide un suspiro,
percibo el dolor que te agita,
tu alma en silencio grita,
¡Oh, tu belleza innata!
sin su sonrisa de plata,
¡no soporto verte triste!.
Perdona a quién te insiste
éste simple desconocido
que no se ha contenido,
si acaso tu tristeza al brotar
osaría a perdurar...
-pues, no lo voy a permitir,
me gusta verte sonreír,
Sí, tu sonrisa me contagia,
Y de repente se enciende la magia…
Dejo de escribir, creyó que era suficiente para que ella, despeje esas sombras…mas, ¿Cómo le hare llegar mi escrito?, pensó, observo y de pronto a lo lejos un niño, (aquel jugueteaba muy a menudo por aquel lugar), y su pensamiento aguzaba, enviarle con la misiva a la princesa acongojada…
Así el pequeño sin saber que sucedía solo entrego la misiva y al ver su misión cumplida iba a darse a la graciosa huida…más; ella le detuvo, espera pequeño, no te irás sin que lo lea, siéntate y deja que me apresure con mi pluma en mano una respuesta para quien te ha enviado, sepa que, no debe hacerse así a una princesa…y su mano llevo al papel copiando al paso las letras:
Hola desconocido…
Hola, “desconocido”
Gracias por el cumplido
Más, veo que eres cobarde
Para que el papel le resguarde
Su rostro esconde y yo le riño
Por mandar el escrito con un niño:
Pero, ¿Cómo es que me ves?
Mira que osado, ¡Como te atreves!
¿Acaso husmeas mi espacio?
Haber, -vamos despacio
Yo estoy triste más ¿Que a ti?
Eres un perverso, sí, a ti
Deja que te encuentre y verás
Pronto en la horca estarás
Mi padre te colgará por ser
De ojos ligeros y venirme a ver
…..
...ya te lo has creído verdad
…..
Jajaja -Sólo bromeo \"romeo\"
A pesar de que no te veo
Te diré que cuides esas miradas...
Yo no creo en cuentos de hadas
Esa es mi tristeza señor mirón
Llevó herido mi corazón...
Había empezado de forma extraña una amistad inusual, solo se escribían misivas que día con día les acercaban, se conocían, mas no se veían. Era un ir y venir de secretos descubiertos en papeles coautores de la magia que entregaban aquellas confesiones y consejos amorosos…..
.........…