Eres tú la rosa más blanca
del vasto y pintoresco edén.
De belleza eres percepción
a tu lado vida es la sensación
Sonriente y bella flor albina
tu dulce fragancia es divina
engalana siempre mi vida,
puesto que tu pasión jamás se olvida
Entre el roció de la mañana,
con puntualidad asediada
te contemplo a hora temprana
de tu grandeza mi alma enamorada
Eres perfección material
la inmensidad espiritual
rosa fuera de lo habitual
nunca te llegaras a marchitar