ANHELOS
Me gusta ver el cielo de estrellas tachonado,
me gusta ver la luna que surca el horizonte,
rodeada con hermosas rosadas nubecillas,
me gusta oír el viento susurrando en la ventana
y músicas alegres haciéndome escuchar.
Me gusta ver las flores y bellos azahares
hermosos en el campo loando al creador,
me gusta oír las aves alegres y cantando,
y oír los copetones y lindos ruiseñores
trinando en los frutales del huerto de mi hogar.
Me gusta ver las luces indecisas titilando
llevadas por los fieles en torno a un pedestal
y en noches estrelladas los pechos resonando
loando a la Señora de hermosura sin igual.
Me gusta oír la fuente alegre y bulliciosa
que pasa cantando por el patio de mi casa
arrullando las noches de insomnio macilento,
las horas silenciosas de dulces ilusiones
en esas noches largas tan llenas de recuerdos.
Me gusta ver los cielos azules en verano
y ver en los jardines, los nardos y claveles
ansiosos esperando las manos que los lleven
muy pronto a los altares de Cristo y de María
Quisiera ver la tierra poblada y prosperando
en paz y sin engaño los hombres laborando.
En las iglesias los fieles celebrando
las fiestas de María en torno a los altares.
Quisiera oír rezando el rosario en los hogares,
los padres con los hijos fervorosos y cantando
en Mayo celebrando las glorias celestiales
de la madre cariñosa de Dios y de nosotros.
Y oír cantar un ángel allende la llanura
con músicas divinas y cantos celestiales
acompañando las plegarias de los fieles
que rezan y que piden fervorosos protección.