Unos de los malhechores crucificados,
Insultándolo, le dijo: ¿Así que tu eres
El cristo? Entonces sálvate tú y sálvanos
También a nosotros. Pero el otro le respondió
Diciéndole: ¿no temes a Dios, tu que estas en
El mismo suplicio? Nosotros lo tenemos merecido,
Por eso pagamos nuestros crímenes. Pero él no ha
Hecho nada malo. Y añadió: Jesús, acuérdate de mí
Cuando llegues a tu reino. Respondió Jesús: realmente
Te digo que hoy mismo estarás conmigo en el paraíso.
Lucas 23,35-43
Quiero pedirte como aquel malhechor
Aun estando tú en la cruz
Estar en tu lado sin temor al dolor
Y cuando llegue tu reino puedas darme luz.
Con una sola palabra te podrías librar
Y por amor a nosotros quisiste sufrir
Quiero ser perfecto como tu al amar
Y que en buena comunión podamos vivir.
No soy digno a merecer tu amor
Pero créeme que día a día lo intento
No tengo duda de que eres mi señor
Aquel que resucitó de entre los muertos.
Solo somos instrumentos de tu pasión
Y por siempre y para siempre la gloria es tuya,
Jesús te guardo dentro de mi corazón
Recibe con amor mi eterna aleluya.