AL PARTIR
En un nimbo de agua
se irritan cristales derrotados por el horizonte,
los oídos despiertan aquietados
por el canto de sirenas de despedida,
el puerto del alma repleto de sentires,
un corazón angustiado… se suelta las amarras
y decide alzar ancla insinuando la tristeza.
En una valija de recuerdos
he guardado las risas y mis versos,
la hebra de su pelo,
el pañuelo amarillento de sus lágrimas,
un mohín a la ventura,
la diminuta foto de su risa,
sus ojos diluidos como luna,
el perfume de nardo de su cuello,
y un montón de sentimientos viejos.
Mi sombra avanzando hacia el olvido,
una huella impregnada en el espacio,
mis sueños disgregados por el viento,
caricias amansando la nostalgia,
destellos de te quiero en aluvión.
Me levanto de mi banca de tedio
a perderme en lo infinito,
con sollozos hechos rimas,
con un cantar de añoranza,
mi mirada es golpeada por el anhelo,
oleos de dulzura rayan mis ojos,
sólo memorias derretidas brotan de ellos.
Ya con los pies en la distancia
entre bruma y espuma
y una brisa marina
mi olfato en sinestesia suspira
y por cada una de mis mejillas
en silencio…
bajan inhóspitamente mil gotas de lluvia
remojando el sendero recorrido
por la triste nave/ de mi sola soledad.
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