Ramón Merino (porore)

A BEBER DE TU AGUA

A enamorarte, niña,

vengo cada mañana,

para eso entorno las horas,

para eso abro tu ventana.

A despertarte, niña,

a espabilar tu sonrisa,

esa que esconde tu cara,

esa que yace dormida.

A que me alegres, niña,

con esa tu dulce mirada,

que empapa mis ojos,

que me estremece el alma.

A desnudarte ,niña,

y a enamorarme de nuevo,

como hago siempre

cada vez que te contemplo.