Josefina 46

A MI MADRE

Déjame contarte madre mía

lo acontecido en mi vida

desde aquel fatídico día

que te fuiste de madrugada.

 

Déjame decirte madre mía

la huella profunda que dejaste

de una época de amor y ternura

a los tres hijos que engendraste.

 

¡Por qué será, madre mía,

que has tenido que dejarme

para darme cuenta de tu valía,

el amor desinteresado y la dedicación

albergados en tu corazón!

 

Hoy quisiera madre mía

en alas de la fantasía

recibieras con alegría

estos versos que nunca yo

te escribí en vida, y que son

nacidos del corazón.

 

Palabras que debí decirte

y que ya nunca te diré,

el paso de la vida de repente,

hoy me muestra claramente

la grandeza de tu querer.

 

Más que nunca necesito

de tu presencia, de tú Fe,

de ese calor humano tan grato

que sólo una madre puede tener.

 

Y aunque tarde, madre mía,

por favor, olvida y perdóname,

lo que yo daría hoy en día

por sentir tu compañía

y volver juntas al ayer.

 

Fina