ALGUIEN SE METIÓ EN MI CAMA, TENÍA TU CUERPO
Alguien se metió en mi cama, tenía tu cuerpo,
llevaba puesta tu pijama y tu olor a heno,
sentí abrazarle con ternura, sentí tu aliento,
sentí tus labios en mi boca, sentí tu beso.
Eran tus cabellos rizos entre mis dedos,
era la piel de tu carne, la de tu sexo/
tus manos que me acariciaban en el silencio,
tus turgencias llenando espacios sobre mi cuerpo.
Alguien que hablaba tu voz con dulce acento,
alguien que me secreteaba al oído en verso,
la luna fue fiel testigo de aquel encuentro,
el tiempo nos vio unidos y en magia envueltos.
Alguien se metió en mi alma y en mis sueños
como el aire que se inhala y llena el cerebro,
lleno mi habitación y como espectro
me despertó avivando mi espacio muerto.
Hicimos de la noche un concierto,
gemidos, risas, suspiros y silencio,
en sabanas impregnadas del te quiero
dejamos nuestra esencia sin saberlo.
De pronto desperté en sudor envuelto,
y te busque en mi alcoba con anhelo,
sentí reminiscencia aquí en mis dedos
la de tu piel de niña hecha un recuerdo.
Y luego comprendí que era un sueño,
hermosa irrealidad que ahora no tengo…
alguien se metió en mi cama tenia tu cuerpo,
lo sé, era tu alma en cada gesto,
producto de mis ansias o del desvelo
o la consumación de mis deseos.