Probablemente harás lo mismo que hice yo en Navidad, cumplir con los compromisos que ciertos días del año se nos ha impuesto por diferentes medios que llevan solo a un objetivo, que compres mas, que te gastes mas dinero para seguir incrementando las riquezas de otros bolsillos...por que no hay un solo día del año en que las personas estén exentas de un motivo que como compromisos nos han ido inculcando...
Reyes, Navidad, día del padre y de la madre, amistad y amor, santos y aniversarios, día de los abuelos, de las mascotas, del hambre, malos tratos, salud y yo he solicitado el día del gas, del teléfono y la electricidad unido a un paquete conjunto con el día de la comida y vivienda para todo el mundo... también el del olmo que hay en la acera de mi casa para que no lo corten para poner un prohibido aparcar...aunque dudo que haya alguna persona que me regale algo el día del olmo...
Aunque me lo tome en plan jocoso y a mi me gusten tanto los regalos como a cualquiera, el tema de fondo de esta reflexión, va encaminado a que solo nos acordamos en días señalados de las personas, tenemos un detalle, cumplimos y después pasan meses en los que nos despreocupamos sin darnos cuenta el dolor que
podemos causar en seres sensibles que mas que un regalo, necesitan sentir que te acuerdas de ellos sin necesidad de ser su santo, su cumpleaños o todos los demás inventos creados por el hombre...
Tengo buenos amigos, que desde navidades no les mandé ni un saludo y aquí estoy con esta reflexión deseándoles un feliz día de la amistad y de San Valentin y lo hago para recordarme a mi mismo,
como debían de ser las cosas...mea culpa...
El día que yo empecé a sentirme mas feliz, fué cuando dejé de enfadarme o sentirme mal por lo que me hacian los demas y mire a mi interior para entender que hacia yo de bueno por ellos...
Ángel Reyes Burgos
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