Alejandrina

INVIERNO INMINENTE


Se aproxima el otoño incendiando crepúsculos

señala  en mi frente del invierno la escarcha

 

En este punto exacto se agotan los senderos 

andados con tus pies de hastío y de costumbres.


He cruzado un laberinto de párpados mustios 

gastando lozanías de inmaculadas rosas.

  

Una pregunta suspendida en el aire 

azota la nuca como golpe de agua fría .    


¿ Quién parió sobre el lecho este abismo,

de lunas quejumbrosas, de  haz oxidado ?    


¿Cuando nació esta distancia entre tu espalda 

y el cuenco mis manos ?


Me dormí en mi sillón que no tiene un hogar

esperando el bullicio de un te quiero nacido en tu boca.  


El canto de un arroyo que nos lleve  al mar 

para cosechar rutilantes miradas, sumergidas estrellas.


Mis dolidos brazos soltarán sus  palomas rumbos sur, 

si acaso allá  encuentren un trozo de libertad en otros ojos.


Alejandrina.