Un ápice de sensatez me falta… una fracción de racionalidad… un poco de calma…
Me sobra en cambio una multitud de sueños despiertos… de tu imagen a mi lado… de mis manos y labios contra tu piel, contra tu pelo…
De tu luna tengo el sueño por las noches… de tu soledad acompañando a la mía junto con vino tinto tiñendo tus cabellos… embriagando los cuerpos… manchando los miedos… desafiando calendarios y amaneceres…
Un ápice de sensatez me falta… vos desafías mi fuerza y mis manos… mis labios y poemas… mis lienzos y notas... mi sensatez escasa y mis ganas de sobra…”