Como mariposas, con sus alas extendidas,
Volaste libre, por los jardines de la vida,
Mas el amor, quemo tus alas de mariposas
Y no volaste, por encontrarte herida,
Quizás impidieron que levantaras el vuelo,
Más jamás, lograron terminar tus sueños,
Aprendiste con valor estando en el suelo,
Seguiste libre, sin ataduras y sin dueños,
Hoy vuelas libre, ufana y orgullosa,
Elegante como un perfume seductor,
Recuperaste tus alas de bella mariposa,
Para volar entre flores, señora tentación,
Con una mirada tierna y embriagadora,
Mirada cautivante de niña y de mujer,
Ardiente, inexplorable, sutil y soñadora,
Mirada que presagia un bello atardecer,
Tus labios exquisitos, una gran tentación,
Tentación de besarlos o escuchar un te quiero
Y al mirar tu sonrisa, acabar, con perder la razón,
Eres un embeleso de mujer, señora tentación.
AUTOR: GILBERTO DE LA CRUZ GUTIERREZ