Yo no tengo la culpa que me gusten las mujeres
Altas flacas cual lebreles mientras mis manos la auscultan
La sangre que hay en mis genes de buen macho me facultan
Para cumplir con mis sueños con doncellas que me abultan
La carne de los deberes.
Solo pido amor por mis enseres
Que poco a poco asustan a la mujer que se viene
Con esta herramienta hirsuta que Dios nos dio como bienes
Mereciendo por ello una multa.
Que la vejez ya no tiene
Más que la palabra justa.
Yo no tengo la culpa
Que mis ojos no hayan crecido
Y quieran núbiles mujeres
Para ver si aún resulta
La copla de los placeres.