Hugo Emilio Ocanto

¿Decidiste venir a visitarme? (Monólogo)

Entra, no me tengas miedo.

Aquí donde estoy

no podré hacerte daño.

Siéntate...¿decidiste venir a visitarme?...

Me alegro. Hace días que tengo la ilusión

de que lo harías.

Todo en la vida llega.

Y para mí, ha llegado este momento.

De estar donde estoy,

y tenerte a tí, delante de mí.

¿qué vienes a decirme?...

Acepto que no hayas venido antes.

No fui digno de tu visita.

Pero ahora lo estás haciendo...

¿Digno soy ahora de tu presencia?...

Después de tantos años...

¡Qué orgullosos hemos sido!

Ha llegado el momento de aplacarlo.

De deshecharlo.

Ha llegado el momento...

del cual muchos han de sentirse felices...

cuando llegue, mi final...

Gracias por pedirme perdón...

Aunque tendría que ser yo

el que te lo pida.

Perdóname tú a mí.

Los años pasan...

Vuelan... sin darnos cuenta.

Si nos diésemos cuenta

de nuestros errores

cuando tenemos salud,

y estamos de pie, todo hubiese

sido tan distinto...

Recién ahora, aquí donde estoy,

me doy cuenta qué cruel he sido

cuando en pie me hallaba.

Ahora estoy en cama,

enfermo, y muy cercano a mi final...

cruel... por haberme comportado

como lo hice.

Quise llevarme

el mundo por delante,

prosperar, triunfar, amar...

y ser amado... parte de ello lo logré,

y no he sabido retenerlo...

Prosperé, triunfé, amé, me amaron...

me amaste, y ya todo lo he perdido.

Recién ahora me doy cuenta

que hay que seguir la ley de Dios,

pero cuando nos sentimos bien,

la ignoramos, la dejamos pasar...

Y cuando la vida todo nos quita,

más cerca del Señor nos sentimos...

¡Cuántas veces te he llamado,

y todas ellas me has evitado...

como a un leproso!...

No te recrimino, solo

estoy recordándotelo...

Tus silencios eran justificables,

no quería aceptarlos

ni entenderlos...

Pero la vida me ha enseñado

que en este mundo,

no hay que ser tan porquería...

Sí, déjame decirlo...

Lo he sido, pero me estoy dando cuenta

demasiado tarde.

Decidiste venir a visitarme...

por lástima, ¿verdad?

porque sabes que dentro

de muy poco ya

no estaré en este mundo.

¿Sabes? Ya no le temo a la muerte...

ella me espera...

Yo a tí te he esperado tanto...

y tú me has pagado con lo 

que me merecía, con tu silencio...

Las horas que he desperdiciado

donde no debía estar...

Ahora mis amistades no vienen

ni han venido a visitarme.

Solo estás tú... mi ex esposa...

la que fue mi amor,

y la que perdí, por cruel...

Por ambicioso, por dedicarme

a la vida nocturna,

con mujeres y amigos

que no se lo merecían.

Tenía dinero, tenía poder...

Ahora ya no los tengo...

Te tengo a tí, a mi lado...

cuando debí haberte tenido siempre...

Sí, siempre, y también a tí

te perdí, por mi culpa...

Déjame llorar, déjame...

no me consueles, no me lo merezco...

La que está por llegar me merezco...

no me consueles, pero quédate

a mi lado, hasta el final, te lo pido...

Mi final está cerca... mi amor...

déjame decirte así, siempre

lo has sido... siempre...

Solo te pido me des,

un último favor...

que me beses... deseo...

tu último beso...

y he de morir feliz... gracias, amor...


Todos los derechos reservados del autor( Hugo Emilio Ocanto - 21/02/2013)