En el rutinario de los días,
Embalsamado el tedio….¡solo con tu mirar!
Veo la sepia del paisaje árido;
Rotar fuera de mi ventana,
Semejante a las dunas en su sequedad;
Aquí en este pueblo lejano y olvidado,
Donde nada surca…… ¡más que la soledad!
¡Ya en la flores ……no hay roció!
¿y cual roció? Si flores tampoco hay,
Y si miro al cielo azul limpio;
Sin una pizca de humedad,
Hermoso …..sin igual;
Advirtiendo que no lloverá,
Advirtiendo, que nada será inusual;
Y el calor que mi alma consumirá,
Y esta inercia que me desgasta;
Solo verte allí postrado,
Pasando los años, buscando en tu mirar;
Esa luz que te interpreta,
¿Y no sé qué será mejor?
Tenerte inerte, y sombrío;
O saberte yerto, pero vivo,
En mundo verde y fértil
Fusionándose en mil colores;
Allá donde la vida es suave como brisa
Allá entre nubes,
A veces no sé si es el calor, pero alucinó
Viéndonos como hace tanto,
En la felicidad Juvenil que algún día nos cubrió
Y que los años y esta enfermedad
Que te consume……..! se llevó!
Hoy solo sé que me siento cansada, y mis canas
Mojo en este café amargo, como esta soledad
Aunque estés aquí, no encuentro tu luz,
Se perdió en la sinapsis de tus recuerdos;
Dejándome aquí árida como este pueblo
Que me extingue poco a poco en el olvido.