Madres solteras,
soportando fuertes vientos.
Trabajando jornadas dobles,
valientes y nobles,
con el corazón hecho pedazos
dejan sus hijos encargados
y en el transcurso del día
recuperan el aliento al recordar
la sonrisa de sus hijos e hijas,
todo por amor a ellos
soportan humillaciones
y son avergonzadas
mas nada importa por amor,
por las noches lloran
por los días sonríen,
su felicidad son sus hijos
y por ellos estarían dispuestas
a morir.
Guerrero Montes Carlos.