Salvaje te marchas
en viaje de ensueño,
despliegas tus alas
y remontas tu vuelo.
En nubes de plata
te posas etéreo
diseñando el mundo
que ansías perfecto.
Me quedo en la tierra
a tu lado en el lecho...
Miro tu sonrisa
al emprender tu ascenso,
a veces te sigo...a veces me quedo.
Y yo, sutil dama en tu pensamiento
tejo con mis manos
cadenas de seda
que ato a tu mente
sin que tú veas.
Se alza tu alma sintiéndose libre,
pero no me dejas, me llevas contigo.
Porque eres preso de un embrujo mío,
y yo de tu amor...donde me cobijo.
BlancaLis