Santi Piedra

Mirando la llanura vi volar mi alma.

 

 

Cuanto hace que no vuelan los cisnes

sobre esta cordillera de siniestros rostros

ni llueve con rigor en este desierto

sin esperanzas de vida,

 

cuanto tiempo sin sentir

el rocío matutino en las montañas del acierto,

tiempo aquel en el que entre pájaros volaba sin afanes

divisando coloridas nubes en paisajes de encanto.

 

Vivo en la constante persecución del sol y la luna

dibujando amores con lágrimas rotundas.

Fijo mi mente en los arboles de antaño

siempre firmes en el horizonte

recordándonos el tiempo de abandono,

 

la espera sin pausa a aquellos plumajes

que rondaban las llanuras

en busca de emergidas esperanzas

perdidas en la nada.