En la lluvia del lunes
lavé el rostro ajado
cubrí con mis manos tanto desierto
y pedí a la luna y sus cuentos
Pedí limosnas, risas, vuelos
recordé a la mujer de pelo negro
a sus caprichos y sus memorias
heladas, continuas, pasadas
Si camino por el sendero
si sacudo mis alas, las del cuento
si creo que allí fue escondido el sol
y que las rosas viven en las orillas
Si los muebles de niño
si las manos de mi abuelo
ay de mi que perdí las memorias
ay de mi y de los cuentos
Cuando ya no pueda recordar
tu espalda, la estufa, la alfombra
cuando ya nombrarte sea fracaso
el insomnio, la voz, el fuego
Ríe y corre las sierras
trepa por el árbol y por mis venas
dime si tanto dolor, si el cuento de hoy
ay de mi y de ti, ay de los vestigios
Llama al cartero, lleva mis vidas
guarda la esquina del abrazo
no pierdas los anillos
duerme en el que cuento
que escribí para ti.