"Cuando te aceleran el corazón/ eres como un volcán que está avisando/ que pronto entrará en erupción/ pero a nadie dirás cuándo"
Un volcán siempre es un volcán,
sus energías sabemos que están
aunque esté apagado o ya activo,
igual sabemos como cosa cierta,
que cuando furioso se despierta
para eso hubo seguro un motivo.
Tal cual estás tú, despierta, activa,
una caricia muy oportuna te motiva
y hace que tu cuerpo se estremezca.
En tus emociones el impacto ha sido
tan fuerte que hace con el estallido,
que un volcán en erupción parezca.
Eso mismo eres tú, un gran volcán,
con energías que deseando salir van
extendiéndose como lava ardiente.
Sólo tú y yo que te conozco sabemos,
porque es obvio que nos parecemos
en lo que cada cuerpo vive y siente.
Un beso donde te gusta que te besen,
una caricia donde los deseos crecen
y palabras que se susurran al oído...
te convierten mujer en pura dinamita,
explosión de pasión que ya nadie limita,
locura que nunca deja de tener sentido.
Poco sabe quien no ve tu mundo interno,
hay tanto fuego en ti que es como infierno
que arde en crecidas e indetenibles llamas.
Hay que ver toda la pasión que viertes,
en qué clase de hembra te conviertes
cada vez que te aman... y cuando amas.
Volcán eres, de eso no tengo ninguna duda,
explotas así en toda tu esencia, desnuda
y te brota la emoción a borbotones...
Cuando de amor y pasión son los temas,
se refieren a ti todos los versos, los poemas
y hablan de ti también las canciones.
Eso es lo que de otras mujeres te diferencia,
esa maravillosa y tan singular esencia
que te coloca aparte, que tanto te distingue.
Cuando sobre tanta pasión, tanta belleza,
quien te come a besos sabe bien que besa
un volcán hermoso que jamás se extingue.