Ah! Lasitud placentera
Sentimientos carnales, puros y banales
Tan diáfana toda tu alma entera
Ah! Lasitud placentera
El alma toca la vida eterna
Cuando el corazón se detiene en la calma
los aromas florecen de tu cuerpo de reseda
Ah! Lasitud placentera
La luz se escapa en pensamientos vacíos
En los vientos de mi pecho bravío
La oruga se posa con su cuerpo de seda
Ah! Lasitud pasajera.