En esta carta plasmo, mis buenos y malos recuerdos...
momentos alegres y otros pesarosos.
Los momentos de dudas y el sabor de los daños.
De sueños soñados que jamás existieron...
y de los deseos deseados que se cumplieron.
De caminos rectos y caminos empedrados...
de noches solitarias... y otras, en calurosos brazos.
Noches de pasión salvaje y desenfrenada...
y noches de anhelos inertes y desolados.
Escribo en esta tarde oscura y fría...
fría como mis recuerdos... obsoletos y arcaicos.
Maquillando mis versos con el sudor de mis dedos...
con grises oscuros y el carmín de unos labios.
De la sangre derramada por heridas de espinas...
pero también de la fragancia de rosales azulados.
De los amigos que creía que eran eternos...
y que solo han sido pasajeros del olvido.
De las veces que he llenado el tiempo de nada...
y al final de nada el tiempo me ha servido.
De las veces que he vivido bellas fantasías...
y de tantas otras quimeras que he destruido.
De los días saturado de licores y vinos...
y días que me embriagaba del sabor de unos labios.
Del derramo de lágrimas no fingidas...
y de aquellas que fluían de falsos diálogos.
De tantos dulces besos fielmente dados...
y de otros tantos besos que fueron robados
De los " te quiero amor" entre labios sinceros...
y de los "te odio" en el silencio de corazones falsos.
De esas aventuras que terminaron en buen puerto...
y de otras hazañas que a la deriva marcharon.
De caricias suaves como pieles sedosas...
y de esas que te raen como chuchillas rotas.
De las veces que me he creído un hombre importante...
y en las que me ocultaba en la sombra de mis cobardías.
De mis egoísmos acusados... y de mis dadivas ofrecidas.
De mis virtudes fastuosas y llenas de zalamería...
y de mis defectos que son muchos y anegan mi ego.
De los abrazos con cariño que me han regalado...
y de los empujones con desprecio que he recibido.
Cuando abandone esta consciencia que tanto me ha dado...
Quedara esta carta para recordar mi pasado.