Esa noche me sorprendió tu presencia
Buscaba tu voz danzando en el viento
Y Aunque no conocía lo que siento
Te extrañé por el destello de tu ausencia
Sé que eres de mi amor la esencia
La única flor sobre el dorado pasto
Las fresas frescas sobre mi canasto
Cielos de ternura, mi mejor caricia
Por eso sin buscarte te encuentro
Por que vives aquí, en mis adentros
En la mitad, el medio, en el centro
De mi corazón y alma, eres el cetro
Siente por mí lo que por ti siento
Y Hagamos de esto amor eterno