Un músico invisible pinta tus ojos
Con arpegios de campanilla
Les da sonidos de agua
Ecos de selva con árboles altos
Resquicios de luz entre tus dedos.
Los diapasones tocan una sinfonía
De violines al viento
Y pianos apenas acariciados
Cuando miras cantando
Sin cantar ni una palabra.
A veces tus ojos cantan rascacielos.