Callo una boca sobre su boca
Y aquel beso desesperado lo sintió amargo
Por el vino que habían tomado.
Ella quiso rechazarlo
Pero aquella boca apasionada
Sintió que la acariciaba.
Entonces los besos se tornaron dulces
Sintió una mágica pasión
Que la abrumaba.
El la amaba con sus labios
Con sus manos con su voz
Y con su pensamiento.
El la amaba
Atrapando cada célula de su cuerpo
En la punta de su lengua.
Y los gemidos placenteros de ella
Se enredaban entre sus ropas
Colgados en una esquina de la cama.
Enamorada del deseo
Dejo su cuerpo libre al morbo Para que aquel varón
Le haga sentir el delirio del clímax que da el sexo.
Se dejo amar sin reserva entregándole su carne y su alma
Y aquel gozo soñado la sorprendió cuando el cabalgaba
Como jinete asustado sobre una yegua desbocada.
Aquella noche se amaron como nunca lo esperaron
Ella lo amo entregándose sin límite
El la quiso como nunca había querido.
…………………………………………………………………………………………………..