"Ésa que su atención me presta,/ que me escribe, que me canta,/ me lleva en el corazón cuando se acuesta/ y en el alma cuando se levanta"
Un poema a tus ojos cuando brillantes me vean,
uno a tu boca cuando muy cerca de la mía esté,
otro a los poros de tu piel que tanto me desean
y a los tantos lugares bellos que contigo imaginé.
Poema a tu voz cuando mi nombre pronuncie,
uno a tu ausencia al sentir que hoy te necesito,
otro cuando casi me ruegas que jamás renuncie
a seguir en pos de tus pasos hasta el infinito.
Un poema a tus lágrimas cuando sean felices,
uno a tu risa si ella no me tapa alguna tristeza,
otro a todas las palabras de amor que me dices
y letras que digan “amén” si tu alma por mí reza.
Un poema a tu valor, a tu decisión de amarme,
uno a la timidez que mostraste ese primer día,
otro al mundo especial que has podido crearme
a tu hermosa realidad, tu maravillosa fantasía.
Un poema a lo que vivimos, a nuestra historia,
a lo que está por suceder, a lo que ha sucedido,
otro a los recuerdos de mí vivos en tu memoria
y por haberte prohibido a ti misma el olvido.
Un poema a tu piel, a tus pecas, a tus lunares,
uno a tus sueños cuando sé que en ellos estoy,
otro a tus caricias que en mí hacen malabares
y a lo que fui y a lo que estando contigo soy.
Un poema a la vida pues me la embelleciste,
a Dios por ser el pintor que esta obra creó,
otro al momento especial de cuando naciste
y a otro a mi mundo que por ti se transformó.
Un poema a cualquier poema escrito para ti,
a la inspiración que por amarte hoy me llega,
a la felicidad que desde el día en que te conocí
nada me oculta, nada me impide ni me niega.
Letras que mientras yo viva he de dedicarte
en el tiempo presente e incluso hasta más allá
y si descubro que en otra vida volveré a amarte,
le haré con gusto un poema a la vida que vendrá.