ALEGRÍA AJENA
Siempre gozo
con la alegría ajena,
porque de algarabía rebozo
que parece como que me enajena.
Y sí tiene cura
esta situación insana,
es que es una sana locura
a pesar de mi vida tan holgazana.
Y me emociono
hasta verter lágrimas,
por eso es que lo menciono
si de alegría derraman lágrimas.
Solo me gusta
programa de concursos,
pero si pierden me disgusta
sino utilizan todos sus recursos.
A mí me agrada
cuando ganan premios,
sin caerse en alguna grada
y sin pasar por tantos apremios.
Igual me mueve
si la gente algo se gana,
y lo que más me conmueve,
que gane la humilde, no zángana.
Es un encanto
el oír cantar divino,
en algún concurso de canto
que da ganas de tomarse un vino.
Miles de veces
una canción me arroba,
que olvido todos mis reveses
e inclusive mi razonar me lo roba.
Y me gusta ver
mucho “American Idol”,
donde hay chance de volver
y cantarse hasta lo de Billy Idol.
Y veo “La Voz”
de Christina Aguilera,
y ella es como una portavoz,
para verla hay que hacer hilera.
Y el “Factor X”
programa de canciones,
no son películas triple XXX,
acá sí me fluyen las emociones.
También me río
si se ganan la “Lotería”,
y con gran regocijo sonrío
ya que no es ninguna tontería.
Soy muy emotivo,
por cualquier motivo
puedo terminar en llanto,
pero no, si mi llanta la enllanto.
EL MANU