AROMAS
Hoy hueles al verdor del pasto lloviznado por el roció nocturno,
Y hueles a las rosas que sembré para ti juntito al corredor.
También hueles al simple olor de tomateras,
Y hueles a lo mismo que el naranjero en flor.
Y hueles como huelen las hembras cuando esperan
Al macho que les viene a regar su jardín
Para hacer que florezcan y se tornen más bellas
Cuando campana ella y el sonoro badajo
En un cantico mágico suben a las estrellas.
Huelen a miel de rosas los besos en tus labios
Y a leche venusina tus senos maternales,
Y al rio que partía en dos el paraíso
Huelen los jugos lúbricos de tu entraña bendita.
Hueles a sangre en llamas en avalancha yendo
Por tus venas y carnes en pos de mar placiente,
Y hueles a los geiseres que por tus poros suben
Y con el sudor mío crean tibios torrentes.
En fin, hueles a hembra en celo y en combate
En lucha con tu macho que te agrede y te abate
Y no logra tu adarga detener su fragor,
Pero en cada lanzada floreces y renaces
Hasta cuando en el vórtice de la pasión lo haces
Caer en los abismos de tu sexuada flor