Cabalgo entre lamentos con mi triste alma
mis células a gritos piden ayuda
senderos sin alientos de fuego herido
lloriqueo, ruego: viento, llévate mi olvido.
Cubre mi rostro de la tonta cobardía
tierra hunde mi cara en lo más profundo
ventiscan borren mi encanto de lo que fui
y hoy muerta en el patio, acabe con mi vida.